NI MÖET NI OXTIAS... BOTELLÍN DE MAHOU PARA TOD@S

He llegado a la conclusión de que voy a explotar la recien conocida capacidad que tengo para escribir. He estado hablando con mi querido Daniel-Pilar y hemos decidido unir esfuerzos y recuerdos (junto a comprar acciones de pasas BORGES) para plasmar en un libro nuestras vivencias (que fino queda) en el mundo gay . El libro abarcará desde Septiembre de 2001 (además de desaparecer las Torres Gemelas también fue en el mes que conocí a la simpar Daniel-Pilar) hasta nuestros días. Cual enciclopedia Espasa, cada año se venderán las ampliaciones contando lo que han dado de sí nuestras vidas (nosotros le sacamos jugo a los 365 días del año que dá gusto). Lograremos un libro eterno, que no aburrido, ya que nuestras "vivencias" (me encanta la palabreja!!!!!!!!!!) son todo menos monótonas. Desgraciadamente hace algo más de un año, nos separamos laboralmente (como Esteso y Pajares) pero aún así nuestras vidas han corrido paralelas (se puede leer con guión en el medio o espacio: para-lelas, para lelas) y los inescrutables caminos del Señor y nuestra falta total de orientación nos han juntado en momentos que hemos convertido en únicos, fabulosos, memorables...

La razón principal del libro, o mejor dicho uno de los leit motiv de lanzarnos como posesas a plasmar en word nuestros mas turbios recuerdos no es solo el forrarnos a costa de los lectores, no es solo el tener un par de sillas de plástico en una caseta de chapa en la feria del Libro… NO!!!!!!!!! Realmente lo que queremos es una fiesta de presentación!!!!!!!! Queremos juntar a amigos y a gente que estará deseosa de serlo en un lugar chic (Isoleé, MOMA, el AROLA del Reina Sofía…) alabando nuestra prosa, nuestra perspicacia, nuestra locuacidad, etc, etc… a cambio de un generoso catering bien regado con ¿benjamines de Möet? Pues no. Nosotros adelantándonos a lo que se llevará o a lo que debería llevarse os daremos de beber… ¡¡¡¡¡¡¡¡BOTELLINES DE MAHOU!!!!!!!!!!!!

Algunos pensaréis que horterada, otros que tacañería, pero realmente lo que queremos es darle el lugar que se merece a ese botellín dorado de formas tan rubeniana fabricado junto al madrileño Manzanares (y la nueva calle 30)